Por Gilberto Padilla García
Terminó el calvario para los choferes y usuarios de la central camionera de Chapala, al abrirse a la circulación vehicular el primer tramo rehabilitado de la calle Miguel Martínez, entre la Avenida Francisco I. Madero y la calle Juárez, a partir del 19 de enero, en lo que terminan los trabajos desde ese punto hacia la calle 5 de Mayo.
Después de realizar un recorrido por la zona, donde todavía se realizaban trabajos de limpieza y pintura de machuelos, el alcalde de Chapala, Alejandro de Jesús Aguirre Curiel, abrió el tramo a la circulación y destacó la importancia de la obra, ya que la calle no había sido intervenida desde hace 22 años aproximadamente.
La obra que consiste en la sustitución de las líneas hidrosanitarias y construcción de empedrado ahogado en concreto, registra un avance del 80 por ciento y se le dio prioridad al primer tramo mencionado, para facilitar la salida y entrada de los autobuses a la central camionera.
Aguirre Curiel dijo que en la calle no habrá problemas en los próximos 20 años por el tipo de concreto depositado, ya que en algunos puntos –como en la cuadra de la central camionera- se colocó una plancha de 25 centímetros de espesor y se le dieron 14 días de fraguado para permitir el paso de los vehículos.
En entrevista, el primer edil celebró los avances que tiene la obra y agradeció al personal de SIMAPA, de Obras Públicas y a los vecinos de la calle “por la paciencia que tuvieron, porque siempre las obras nos causan molestias, pero finalmente la hemos terminado juntos y muchas gracias por su apoyo”.
La obra de rehabilitación de la calle Miguel Martínez abarca cuatro cuadras y en 15 días se abrirán las dos cuadras que van de la calle Juárez a la calle Zaragoza y después el último tramo de la calle Zaragoza hasta la calle 5 de Mayo que está en proceso, informó el titulr de Obras Públicas, Juan Julio Nova Sandoval.
Por parte del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIMAPA) se colocaron 400 metros lineales de tubería de 16 pulgadas para el drenaje y otros 400 metros lineales de tubería de 6 pulgadas para el agua potable, reemplazando los tubos antiguos de asbesto por PVC que tiene una durabilidad de 20 a 30 años.
Además de las 65 tomas y descargas domiciliarias se construyeron cuatro cajas de válvulas o de visita, para no apagar los pozos que abastecen la zona en caso de fugas y seccionar para poder realizar las reparaciones correspondientes, informó el titular de SIMAPA, Fernando Antonio Monreal Mendoza.
En la obra se invierten alrededor de 8 millones de pesos, de los cuales, poco más de 3 millones de pesos fueron aportados por el municipio para la construcción del empedrado ahogado en concreto, banquetas y machuelos, mientras que el resto fue aportado por el FAIS del 2022 para la construcción de las hidrosanitarias.