Por Gilberto Padilla García
Joel Salvador Torres Arrayga dará vida por segunda ocasión al personaje de Jesús en el Vicacrucis Viviente de Chapala, sin importar el calor, deshidratación, golpes y cansancio que experimenta durante la representación.
El joven de 25 años de edad, descendiente de una reconocida familia de artesanos de Chapala, ya se prepara física y espiritualmente para dar lo mejor de sí durante la representación que va más allá de una puesta en escena.
“Al principio uno se imagina que es solamente una puesta en escena, pero después te das cuenta que es evangelizar con el teatro, porque mueves sentimientos cuando le recuerdas a la gente lo que Jesús hizo por todos nosotros”, indicó.
“El año pasado que fue mi primera participación como Jesús, fue una experiencia muy bonita, espiritualmente me llenó mucho y además, se siente algo que no se puede explicar para los que somos creyentes y tenemos fe”, agregó.
Para Jols, como le llaman sus familiares y amigos, llevar la cruz de madera en su espalda que tiene un peso de casi 80 kilogramos, es el máximo momento, porque sabe que Jesús entregó su vida por la humanidad en la cruz.
“Es la misma cruz que cargué el año pasado, como de 80 kilos de peso aproximadamente, pero más que verlo como una tortura, lo veo como un plan de amor y más cuando ves la reacción de la gente”, refirió.
A pocos días de la presentación del Viacrucis Viviente, Torres Arrayga dijo que la organización avanza conforme a lo programado y que está preparado para hacer una vez más el mejor papel de su vida, el de Jesús.