Por Redacción
El problema de la invasión de zonas federales del Lago de Chapala llegó hasta la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), donde se resolvió que la construcción de un inmueble en las inmediaciones del vaso lacustre, no tiene un impacto en el medio ambiente de la zona.
La ministra Yazmín Esquivel Mossa propuso negar la protección de la justicia a la parte quejosa, al considerar que no había elementos para contemplar que la obra afectara el medio ambiente, ya que el predio no invade la zona federal formada por el vaso lacustre.
Esquivel Mossa consideró que se cumplieron con todos los requisitos, incluso, tres visitas que fueron realizadas a la zona por personal de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) para llevar a cabo las verificaciones respectivas.
Se trata del predio El Estacado, el cual estaría ubicado en el municipio de Chapala, donde se registraron movimientos de tierra sin contar con los permisos y autorizaciones correspondientes, según la denuncia presentada por la parte quejosa.
Al parecer el terreno se encuentra amparado en escritura pública y cuenta con sus registros públicos y catastrales, así como con una licencia de construcción expedida por la Dirección de Planeación y Desarrollo Urbano de Chapala, según el proyecto de resolución.
Durante el juicio de amparo se desahogaron diversos dictámenes periciales en materia de identificación de inmuebles y construcción, así como en materia de topografía, y que en varios de ellos se concluyó que la obra controvertida está fuera de la zona federal.
Finalmente, al resolver el amparo en revisión 313/2024, la Segunda Sala aprobó por mayoría de cuatro votos negar la protección de la justicia federal a la parte quejosa, vecina de la zona e inconforme por la construcción denunciada.
Fue en la sesión pública celebrada el pasado 12 de junio, cuando se negó el amparo con el voto a favor de la ministra Esquivel Mossa y de sus colegas Alberto Pérez Dayán, Javier Laynez Potisek y Luis María Aguilar Morales.
La ministra Lenia Batres Guadarrama argumentó su voto en contra y lamentó que se haya negado el amparo contra la venta y urbanización de una parte del vaso del Lago de Chapala, sin un estudio ambiental.
“Voy en contra por la defensa del ecosistema del Lago de Chapala y simplemente hago notar que hay una tendencia, para mí incomprensible, para desechar casos que sí revisten importancia social y que repercuten en el interés público”, dijo.
“En este caso del medio ambiente y en una zona de crecimiento urbano que necesita en este momento la protección del estado mexicano, en el cual nosotros deberíamos jugar un papel fundamental y estamos dejando en estado de indefensión al ecosistema del Lago de Chapala”, declaró.
Mediante un comunicado de prensa, Batres Guadarrama señaló que el análisis de la ubicación y definición de una posible invasión de la zona federal señaladas en el expediente, permitió identificar una contradicción en los oficios emitidos por la CONAGUA sobre un probable traslape entre los terrenos privatizados y el área correspondiente al vaso del Lago de Chapala, “…por lo cual era indispensable recurrir a un peritaje antes de apresurar cualquier decisión”.
Advirtió que la comercialización de esta parte del vaso del Lago de Chapala supone una posible afectación a un bien nacional en la que no se puede afirmar que no exista riesgo ambiental, por lo cual era necesario un peritaje completo de técnicos expertos en la materia.
Consideró que para conocer “la verdad real” se debe reponer el procedimiento perfeccionando las pruebas periciales para identificar plenamente el predio de la parte quejosa, el predio El Estacado, el predio concesionado y la zona federal del Lago de Chapala.
“Y a partir de ello obtener, con precisión, la ubicación geográfica de cada uno para verificar si existe un traslape o invasión a la zona federal del lago”, señaló la ministra en el posicionamiento que presentó en su ponencia sobre este punto.