Javier Raygoza Munguía
Muchas iglesias del país han sufrido dramáticas transformaciones gracias a la iniciativa de sus curas por querer mejorar, restaurar, cambiar o ampliar sus parroquias y como resultado tenemos una revoltura de estilos.
A lo largo y ancho del país se han afectado estos edificios y se cometen pecados arquitectónicos como enjarrar sobre cantera o cubrir fachadas de tezontle, borrar murales modificar altares, quitar patios, tumbar arcos y un montón de cosas.
Aquí en Chapala nos ha pasado lo mismo con la parroquia que ha sufrido muchos cambios, siguiendo modas o adecuándose a las necesidades para comodidad de los fieles… para bien o para mal.
El mito dice que en 1548, fray Juan de Almolón inicia la construcción de una iglesia en Chapala que fue de adobe y zacate, al mismo tiempo que un convento.
La zona ya llevaba 18 años de evangelización por parte de Fray Martín de Jesús o de la Coruña, fray Juan de Padilla y fray Miguel de Bolonia.
Para el año 1567, probablemente la primitiva construcción de la iglesia ya estaba más elaborada, pero con un terremoto que hubo el 30 de diciembre de ese año derrumbó “parte de la capilla mayor de la iglesia del pueblo de Chapalac”.
En 1581 el mito dice que un indígena llamado Pablo García, hijo de Martín García, prendió fuego a la iglesia de Chapala.
Con los años, la pequeña iglesia se fue acomodando y en el año 1607, por medio de Fray Andrés de Medina, se hizo una campana para el templo y fue ornamentado por fray Melchor Castellanos.
El 26 de abril de 1828 el entonces cura, Antonio Palacios, le solicita al ayuntamiento la necesidad de componer la iglesia parroquial y sacristía, porque se encontraba en un estado deplorable. Y las autoridades aprueban hacer junta patriótica y abrir una suscripción voluntaria.
Pero parece que la gente no era muy cooperativa porque en el año de 1852 el cura Mauricio López recibió la parroquia de San Francisco de Asís completamente destruida, faltaban tres bóvedas pero buscó la forma de taparlas y se dispuso a hacer el altar mayor porque era de gradas de adobe, además hizo la estructura para las campanas, la puerta del costado y blanqueó el templo por dentro y por fuera.
Del 4 de junio de 1868 a 1871 estuvo como cura encargado de la parroquia de San Francisco de Asís de Chapala, el licenciado José María García San Martín, quien también se dio a la tarea de pintar la iglesia.
En 1886 las autoridades informaron quien se gastó en levantar la torre de la iglesia parroquial- reedificada la misma, en parte por el señor Cura Don Martiniano Chávez y de su peculio gastó mil setecientos pesos.
Como ven, la parroquia de Chapala ha sufrido muchos cambios y la que más se nota son las desiguales torres.
Los amantes de los mitos dicen que un temblor derribó la izquierda y es por eso que quedó más grande al “hacerla de nuevo”… Este mito lo han divulgado en las redes sociales.
Es una mentira que se haya caído una torre a causa de un temblor. En Chapala aún no se han sentido sismos fuertes, ni siquiera los catastróficos como el de Managua en 1972; y el de 1985 y los que hemos sentido, ninguno ha pasado a mayores, salvo cuarteada de bardas y una que otra viejita que se hincó a pedir clemencia a la ira de Dios.
Por otra parte, se corre el mito de que en las inundaciones de los años 70’s el agua del lago llegaba a las puertas de la iglesia. Esta otra mentira la difunden mucho los turistas, que divulgan el mito de otros turistas o que de niños creyeron ver eso… cuando mucho llegó a las escaleras; había unos tablones para que la gente no se mojara, pero nunca llegó a sus puertas.
Lo que sí es cierto y llegué a ver, es que algunos puestos de comida que se pusieron sobre el camellón debido a la inundación, lavaban sus trastes en esa agua.
A finales de los años sesenta se comenzó a forrar de cantera la fachada de la iglesia. Al respecto escribió Lety Ibarra, administradora del sitio en Facebook Imágenes Históricas de Guadalajara:
” La iglesia ha pasado por varios cambios, uno de ellos fue en 1968 cuando decidieron transformar la iglesia cubriéndola con cantera, llegaron cantereros de Yahualica, de la huasteca potosina y los Ángeles que vemos en la parte superior junto al reloj fue de un artesano de Tlaquepaque, el reloj llegó desde Europa donado por la familia Capetillo a finales del siglo XIX…”
“Cuando se remodeló el altar en 1968, bajo la mesa principal del templo se encontraron los restos del famoso italiano Fray Miguel de Bolonia, se encontró con una túnica de color morado, esto según las crónicas franciscanas, vinieron desde la ciudad de México expertos en este tema y lo confirmaron, los restos del venerable padre italiano Fray Miguel de Bolonia fueron removidos a un costado del altar…”
Por bastante tiempo los chapalenses nos acostumbramos a ver a gente esculpiendo la cantera en el atrio de la parroquia y los feligreses entraban a misa entre malacates y andamios.
Respecto a la torre que no se terminó, se rumoraba que se les había acabado el dinero para continuarla, que los artesanos querían cobrar más caro; pero la más creíble fue que a la otra torre no se le puso cantera por cuestiones estructurales y podría ser peligroso y derrumbarse… Y por eso tenemos una parroquia con torres desiguales ¿Ustedes qué opinan?
FUENTES
Sucesos notables de Chapala /Armando Hermosillo Venegas
https://www.facebook.com/groups/imageneshistoricasdeguadalajaramexico
www.chapala.mex.tl
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