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Castillo del Convento Viejo de San Francisco

Por Javier Raygoza Munguía

Thomas, hijo de inmigrantes irlandeses llegó a México en 1863 contratado para trabajar en la construcción del Ferrocarril Mexicano.

Era empleado de la Smith Knight & Company, cuando ésta firmó un convenio con la empresa creada por Antonio y Manuel Escandón para continuar los trabajos de la instalación de las vías mexicanas en tiempo del Imperio de Maximiliano de Habsburgo.

En el gobierno de Porfirio Díaz, Thomas formó y consolidó su gran fortuna y con el tiempo, se convirtió en uno de los empresarios más importantes del país; “y al igual que él, sus descendientes sostuvieron el régimen, junto con otras familias de la burguesía porfirista”.

Se había casado en 1868 con Lorenza de origen francés y procrearon siete hijos: Jorge, Óscar, Tomás, Arturo, Lorenza, Alberto y Rafael.

Vivían en la ciudad de México en El Paseo de la Reforma No. 27, en una soberbia construcción de más de 30 habitaciones sobre un terreno de poco más de 4,300 m² y 50 metros de frente a lo que había sido el Paseo de la Emperatriz y que se edificó en 1888.

En la última década del siglo XIX, la ribera de Chapala ya era turísticamente famosa, gracias a los promotores extranjeros visitantes y residentes que hablaban, escribían y describían sobre el lago, su clima y sus paisajes.

Así que cuando se presentó la oportunidad de adquirir una finca más o menos acorde a su rancio abolengo, adquirieron una casa en Chapala en 1909 y que apenas se acababa de terminar en 1905 y que se había mandado construir por la señora Trinidad Pérez Rubio de Pérez Verdía, madre del famoso historiador Luis Pérez Verdía.

Esta casa se había construido en los terrenos en donde había un convento franciscano.

En ese entonces el gobernador de Jalisco era el coronel Miguel Ahumada y está documentado que el 5 de junio de 1905 se “eximió del pago de contribuciones municipales y estatales por el término de 10 años a la casa que edificó la señora Trinidad Pérez Rubio de Pérez Verdía, en el lugar conocido con el nombre de “Convento Viejo de San Francisco”.

Tal privilegio se debía quizás a que Luis Pérez Verdía era el síndico del ayuntamiento de Chapala y el presidente Municipal de Chapala era Manuel Capetillo Villaseñor.

Se cuenta que esta familia visitaba su finca en temporada de Semana Santa y Navidad ¿Cuántas veces vinieron? No está documentado, pero aquí comienza el mito.

La finca la cuidaban el señor Daniel Siordia y su esposa Felipa Ramírez Sanabria, Don Marcelino Rameño era el jardinero y cuando la familia visitaba su casa, la hacían de meseros.

Alberto, que en ese entonces era veinteañero, era un audaz joven que disfrutaba de los toros, velear, correr carros, boxear y experimentar con la nueva moda que era volar que hasta se trajo de Europa un biplano Voisin que importó a México. Cabe destacar que Alberto fue el primero en volar un avión en el país y América Latina.

En lo que respecta a Chapala, dice el mito que organizaba de su propio dinero corridas de toros, edificaba la plaza y participaba en la lidia personalmente, acompañado de jóvenes de Guadalajara y México, también tenía las mejores y las más rápidas lanchas de motor y su hermano Tomás, los mejores y más rápidos veleros de entonces.

El mito cuenta que las visitas de esta familia a Chapala eran todo un acontecimiento, pues la gente ya grande contaba que se distinguían por su generosidad, principalmente el joven Alberto.

Se cuenta también que la familia era tan importante y privilegiada que para asistir a las celebraciones religiosas a la iglesia de San Francisco de Asís que estaba a un lado de su residencia, se tendía una fina alfombra y en el interior, en un lugar muy especial se colocaban reclinatorios para toda la familia.

«Las mujeres iban cubiertas del rostro con finos velos, elegantes y costosos, vestidos al piso, muy de moda por las damas distinguidas de la época”.

“El interior y exterior del templo se atiborraba de gente, ya no tanto por asistir al culto religioso, sino por la curiosidad de presenciar la ostentosidad de esta distinguida familia”.

Era tanta su influencia en Chapala que no replicaban las campanas de la iglesia, por no molestar con su tañer la tranquilidad que disfrutaban en su casa de descanso… Esa sí que es influencia y poder, ¿No creen?

Para los sábados de gloria, el joven Alberto mandaba hacer figuras idénticas de sus empleados, Daniel Siordia y Marcelino Rameño.

La figura de Don Daniel la hacía vestido de charro; todo el sombrero, la botonadura de la camisa y pantalón eran pesos 0.720 de plata. La de Don Marcelino, la hacía gordo y chaparro como era él, la panza la llenaba de monedas de la misma denominación que la anterior, para que cuando tronaran las figuras, la gente agarrara el dinero…. Eso dice el mito.

También se comentaba que el inquieto Alberto trajo a la zona el palo encebado, que en la parte de arriba, ponía una bolsa llena de pesos de plata 0.720, complementaba con ropa.

A un lado de este lugar, instalaba un ring para celebrar peleas de box. Al que ganaba le daba un peso con cincuenta centavos y al noqueado sólo un peso de plata… Todos ganaban pues.

La presencia de la familia era tan notable en la ribera de Chapala que venían canoas veleras grandes (tipo “La Paloma”) con gente de San Luis Soyatlán, Tuxcueca, Tizapán el Alto y Jocotepec para disfrutar de los festejos patrocinados por ellos.

Todos estos eventos los disfrutaba don Alberto junto con su familia y amistades desde la terraza de su Castillo del Convento Viejo de San Francisco.

A la muerte de su mamá, la señora Lorenza, quedó Alberto como dueño de la casa, hasta el año 1942 que fue cuando la vendió.

Él falleció el 17 de septiembre de 1966 y en el mundo se le reconoce como el pionero mexicano de la aviación.

Y aquí en Chapala, por sus actividades generosas le llamaban a Alberto Braniff Richar como El Caballero de Plata y al Castillo donde se ubicaba el Convento Viejo de San Francisco, los chapalenses la conocemos como la Casa Braniff… Hoy Restauran Cazadores…

A propósito ¿Ya han entrado a ese lugar histórico de Chapala?

Fuentes:

Archivos del Semanario PÁGINA Que sí se lee!

https://www.vuela.com.mx/…/8263-alberto-braniff-ricard

http://chapala.mex.tl/frameset.php?url=/intro.html

https://grandescasasdemexico.blogspot.com/…/casa…
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